La escritora Gabriela Keselman nació en Buenos Aires, residió largos años en Madrid y en la actualidad vive por temporadas entre esas dos ciudades. Sus obras, dedicadas principalmente a los niños de la primera infancia, han sido traducidas al inglés, francés, portugués, gallego, euskera, vasco, catalán, coreano y otros idiomas. Su libro Cu Canguro (Editorial Norma), con ilustraciones de Nora Hilb, fue uno de los ganadores del Premio Fundación Cuatrogatos 2015.
Gabriela contestó estas preguntas para los lectores de Cuatrogatos:
¿Cuándo y por qué comenzaste a escribir para los niños?
Escribía cuadernos llenos de historias desde que era pequeña, pero nunca había imaginado que sería escritora de literatura infantil. ¡De pequeñita quería ser empaquetadora de regalos! Cuando me fui a vivir a Madrid, trabajé en la revista Ser Padres como redactora y luego como jefa de sección durante once años. De esa experiencia, sumada a mi trabajo previo en preescolares, talleres de creatividad para niños y teatro infantil, surgió mi primer cuento que se editó en esa misma revista. Publiqué muchos cuentos allí –también uno en Caracola (versión española de Pomme d’api)– hasta que salió a la luz mi primer libro, un álbum ilustrado.
¿Cuántos libros has publicado?
Alrededor de 70, solo que algunos ya están descatalogados. Afortunadamente hay otros de largo recorrido, que se siguen reeditando después de 20 años. Y varios han sido traducidos a otros idiomas.