En el año 1975, el Premio Casa de las Américas incluyó por primera vez en su convocatoria la categoría de obras para niños y jóvenes. A La Habana llegaron decenas de originales y el jurado escogió como ganadoras obras como Cuentos de Guane, de Nersys Felipe (Cuba); Globito Manual y El hombre que escondió el sol y la luna, de Carlos José Reyes (Colombia); Renancó y los últimos huemules, de José Murillo y Ana María Ramb (Argentina): La línea, de Beatriz Doumerc y Ayax Barnes (Argentina), y Monigote en la arena, de Laura Devetach (Argentina).
Ese mismo año, Monigote en la arena apareció publicado en la colección de premios Casa de las Américas. La edición, de gran formato y tapa dura, incluía seis relatos de Laura Devetach hoy considerados clásicos de la narrativa breve argentina: “Monigote en la arena”, “Un elefante ocupa mucho espacio”, “Historia de Ratita”, “Los picaflores de cola roja”, “El garbanzo peligroso” y “Cuento que cuento…”.