El miércoles 26 de julio, IBBY Chile entregará su Medalla a la Trayectoria 2017 a la reconocida autora y editora Verónica Uribe.
Periodista de formación y fundadora en 1978 de Ediciones Ekaré, en Caracas, y en 2008 de Ekaré Sur, en Santiago de Chile, Verónica es un referente insoslayable cuando se habla de ediciones para niños y jóvenes de la mayor calidad en Iberoamérica. Además, es la autora de obras de narrativa como Tres buches de agua salada, Diego y los limones mágicos, Diego y el barco pirata, Diego y la gran cometa voladora y El mosquito zumbador; la adaptadora de narraciones indígenas venezolanas como El cocuyo y la mora, El conejo y el mapurite, El rabipelado burlado, El tigre y el rayo y El tigre y el cangrejo, y la antóloga de obras como El libro de oro de los niños, El libro de oro de los cuentos de hadas, El libro de oro de las fábulas, La doncella guerrera y otros romances de amor y Tren de lectura.
Con el propósito de sumarse al merecido reconocimiento que Verónica Uribe recibe en su país natal, la Fundación Cuatrogatos pidió a un grupo de autores, ilustradores, editores y especialistas en literatura infantil que compartieran sus opiniones sobre de ella.
¡Felicitaciones, y que vengan nuevos reconocimientos a tu labor ejemplar y otros muchos libros con la sensibilidad y el rigor editorial que te caracterizan, Verónica!
“Verónica Uribe ha sido mi compañera de trabajo, amiga y confidente desde los comienzos de Ekaré; aquellos días maravillosos cuando no sabíamos en qué nos estábamos metiendo.
“Juntas hemos pasado crisis y sustos, alegrías y sinsabores.
“Vera es el balance, la calma en medio de las tormentas, cándida y sabia al mismo tiempo, paciente y meticulosa, la editora sine qua non. Una domadora de criaturas silvestres, siempre con su fino sentido de humor.
“Raras veces se enoja, pero cuando lo hace es mejor esconderse”.
Carmen Diana Dearden, autora, editora y promotora cultural venezolana
“Verónica es sencillamente excepcional: sabia, generosa, aguda, elegante, delicada, bella, pícara, exigente, constante, quisquillosa, divertida, por supuesto educadísima y… a veces, aunque sorprenda, irreverente. Extremadamente realista, con una capacidad excepcional para ‘distinguir el grano de la paja’: pero de un realismo esperanzado, lleno de entusiasmo contagioso por las creaciones y los logros humanos; creo que por eso ha sido inspiración para tantos… y, desde luego, de forma muy profunda para mí. ¡Verónica, gracias, por tantísimo!”.
María Cecilia Silva-Díaz, crítica e investigadora de literatura infantil venezolana
“Cuando comencé a trabajar en el Banco del Libro, la institución se hallaba en un momento de gran efervescencia y Verónica Uribe era un referente que todos admirábamos. No solo por sus valiosas ideas que siempre abrían alternativas creadoras, sino por esa agudeza para editar desde la transformación. Y eso lo aprendí con ella, trabajando en la revista Parapara y en muchos proyectos de investigación que nos unieron”.
Fanuel Hanán Díaz, editor e investigador literario venezolano
“Verónica Uribe es una editora que admiro porque creó junto con Carmen Diana Dearden un proyecto editorial inédito en América Latina. Recuperando las raíces de la cultura latinoamericana y muy especialmente de la cultura venezolana, crearon un fondo editorial que no solo ha sobrevivido a través de varias décadas, sino que es vigente, atractivo y valioso para el lector de hoy. Verónica es una editora experimentada, autora, traductora, estudiosa de la literatura infantil. Es una visionaria de los libros para niños y sus visiones comenzaron cuando prácticamente nadie las tenía. Es una editora fogueada y formada no solo por muchos años de experiencia sino también por el estudio y la reflexión, además de que ha formado a otros editores en diferentes espacios. Por todo esto aplaudo este reconocimiento y todos los que con seguridad vendrán”.
María Fernanda Paz Castillo, editora venezolana
“Conocí a Verónica cuando viví en Chile en 1996. Ella acababa de regresar de su largo exilio venezolano, lo que nos permitió disfrutar de una hermosa amistad en la que tuvimos incluso ocasión de sacar adelante un bonito proyecto: Oda a la bella desnuda y otros escritos de amor, de Pablo Neruda. Verónica me enseñó entonces cómo ser tenaz y discreta al mismo tiempo, me mostró su gran hospitalidad y una manera de soñar que todavía me acompaña”.
Ana Garralón, especialista en literatura infantil y librera española
“Conocer a Verónica y trabajar con ella fue como encontrarse con un trébol de cuatro hojas cuando estaba comenzando a ser ilustradora. Ella es toda una escuela, obtuve un aprendizaje valiosísimo, que me hizo crecer profesionalmente en muchos aspectos. Los encuentros con Vero siempre se imprimen de una poesía sutil y una sabiduría cuando hablamos de libros. La Vero a veces parece un hada con sus graciosos y delicados movimientos y también es como una reina blanca con su visión aguda, rigurosa y a la vez amable y generosa. Es como un personaje de cuento, de esos que con cariño siempre edita. Me siento muy agradecida de conocerla”.
July Macuada, ilustradora chilena
“Quienes conocen a Verónica sabrán que no exagero si digo que es la editora con la que cualquier autor sueña. Además de su aguda inteligencia y su amable disponibilidad, Verónica posee una infinita paciencia. Lejos de toda prisa y banalidad, su preocupación se centra en el libro. En estos tiempos que -literalmente- corren, esa sabiduría disfrazada de sentido común es un bien preciadísimo”.
Micaela Chirif, escritora peruana
“Pocas personas ven tan claramente un libro donde solo hay un puñado de semillas: textos, ideas o imágenes dispersas. Trabajar con Verónica es aprender a descubrir ese libro, que crece como un árbol: tan lento, tan discreto, y a la vez tan firme y tan robusto (igual que su trabajo)”.
Felipe Munita, autor e investigador literario chileno
“Para mí ha sido un placer y un privilegio conocer a Verónica y formar parte de su hermoso proyecto. Su encanto, su energía, su sensibilidad, su contagioso entusiasmo son clara inspiración para quienes hemos tenido la suerte de colaborar con ella. Su reconocimiento por parte de IBBY no podría ser ni más merecido ni tan oportuno”.
Claudio Muñoz, ilustrador chileno
“¡Sí! Las hadas madrinas existen: convierten las malas frases en calabaza y la cocinan en una rica crema. Con firmeza y afecto, te la hacen comer saboreando cada cucharada. Entonces viene la frase perfecta, el final adecuado, el diálogo ocurrente… Que ¡sí!, que yo conocí a una de ellas: Verónica Uribe… Pregunta a Matías, él te lo puede confirmar”.
Rocío Martínez, autora e ilustradora española
“Verónica Uribe ha realizado una silenciosa y sostenida labor en el campo de la edición y fomento de la literatura infantil y juvenil de calidad en Santiago de Chile. Ha sido un privilegio conocerla en sus múltiples ámbitos y aprender de su experiencia y profesionalismo. Trabajó en el Banco del Libro de Caracas y regresó a Chile a impulsar la literatura infantil y juvenil a través de múltiples proyectos, editando libros y participando en muchas iniciativas relacionadas con la LIJ tanto en Chile como en el extranjero. Un lujo su librería especializada, lo mismo que los libros que edita bajo el sello de Ekaré Sur con visión literaria y sentido estético. La medalla a la trayectoria que le concede IBBY Chile por sus 40 años dedicados al libro infantil y juvenil es muy merecida. Un honor acompañarla en tan significativo momento”.
Manuel Peña Muñoz, escritor, investigador literario y profesor chileno
“Los títulos resultado del largo quehacer editorial de Verónica Uribe constituyen paradigmas que merecen ser estudiados y tomados como modelos por quienes aspiran a publicar buenos libros para niños y adolescentes, especialmente los jóvenes que se inician en las lides de la edición. Como personas que amamos los libros hechos con buen gusto, conocimiento y respeto a los lectores, apreciamos extraordinariamente el trabajo que Verónica ha desarrollado, durante las últimas cuatro décadas, primero en Ediciones Ekaré y ahora en Ekaré Sur. En su caso, más que de una editora de gran elegancia y sagacidad, cabe hablar de una maestra de editores, de un ejemplo de constante renovación y búsqueda de la excelencia”.
Sergio Andricaín y Antonio Orlando Rodríguez, autores e investigadores literarios cubanos