Arcade Club

Arcade Club. Antonio Ramos Revillas

El título Arcade Club hace referencia a las antiguas máquinas de juegos tan populares durante los años 1970 y 1980 y que hoy día parecen tan lejanas de los modernos videojuegos de inmersión total. De cierta manera, este relato del escritor mexicano Antonio Ramos Revillas invita a contemplar los cambios vertiginosos que la tecnología ha generado en menos de un siglo en todos los aspectos de la vida cotidiana y, particularmente, en la vida del protagonista de esta historia.

Aníbal es un adolescente cuyos padres se han separado y que emprende una nueva etapa de su existencia al mudarse con su madre desde un pequeño pueblo a la Ciudad de México. El ritmo frenético de la capital le abruma y seduce por igual desde el principio. La ciudad se nos presenta como un entorno caótico y fascinante, donde Aníbal explora los espacios físicos y sus propios temores e inseguridades a medida que se familiariza con el nuevo ambiente. En ese contraste citadino confluyen grandes espacios abiertos con edificios enormes y calles abarrotadas de gente y tráfico, con zonas residenciales pobladas de casas en donde apenas circulan peatones. La arquitectura y el ritmo variopinto de la ciudad coinciden con la complejidad y riqueza del mundo interior de Aníbal. Observa la ciudad con la misma actitud reflexiva con la que cuestiona su ámbito social y familiar.

A pesar del impacto que tienen en él las decisiones que toman sus padres, y que lo obligan a asumir roles que no le corresponden, Aníbal defiende su derecho a ser un adolescente con las preocupaciones y los intereses propios de su edad. 

Tres compañeros que conoce en la nueva escuela lo harán sentir un miembro importante de su grupo, pero también lo llevarán a cuestionar sus propios límites, la brecha que separa al bien del mal y la peligrosa frontera al borde de la ley. Abel, Lucio y León le dan la oportunidad de formar parte del Arcade Club luego de una serie de pruebas; y aunque en un principio parecía ser solo un grupo excéntrico en contra de las redes sociales y la tecnología, sus exigencias van escalando en agresividad e impacto con cada reto. Estos tres personajes, que en un principio encarnan ese anhelo de Aníbal de ser un adolescente despreocupado, ajeno a las obligaciones y responsabilidades de la vida adulta, van mostrando un lado insensible y oscuro a medida que avanza la trama. Después de conocer a don Manuel, un antiguo programador de computadoras que promueve y organiza las acciones del grupo, la preocupación de Aníbal crece por las repercusiones que estas empiezan a tener en la escuela y por el miedo a defraudar a sus amigos.

La lealtad; la amistad; la relación con la familia y, particularmente, con los padres; la búsqueda de la propia identidad; el sentido de pertenencia y la influencia nociva que adultos inescrupulosos pueden tener en jóvenes vulnerables emocionalmente son algunos de los temas que proponen una interesante reflexión en esta sugestiva novela.

Obra ganadora del Premio Fundación Cuatrogatos 2024.
Betty Quintero