Las  canciones de Natacha

Juana de Ibarbourou

I

Se enojó la luna,
se enojó el lucero,
porque esta niñita
riño con el sueno.

Duérmete, Natacha,
para que la luna
se ponga contenta
y te dé aceitunas.

Duérmete, Natacha,
para que el lucero
te haga una almohadita
de albahaca y romero.


II

La loba, la loba
le compró al lobito
un calzón de seda
y un gorro bonito.

La loba, la loba
se fue de paseo
con su traje rico
y su hijito feo.

La loba, la loba
vendrá por aquí­
si esta niña mí­a
no quiere dormir.


III

El sueño hoy no quiere
venir por acá;
anda, ratoncito,
a ver dónde está.

“Señora, mi ama,
yo lo vi bailar
con dos damas rubias
de la casa real.

“Dile que Natacha
se quiere dormir,
que mi niña es buena
como un serafí­n.

“Que venga enseguida
y le daré yo
un collar de plata
y un limón de olor.


IV

Por los caminitos
de Jerusalén,
va un niñito rubio
camino a Belén.

Le dan los pastores
tortas de maí­z,
leche de sus cabras
y pan con aní­s.

El niñito tiene
los rizos de luz.
Duérmete, Natacha,
sueña con Jesús.


V

Señor jardinero,
déme usted a mí­
un capullo pálido
y otro carmesí­.

Los pondrá en la almohada
donde mi Natacha
hunde su mejilla
rosadita y blanca.

Y al dí­a siguiente
tendrá usted así­
dos rositas blancas
y dos carmesí­.


VI

La señora Luna
le pidió al naranjo
un vestido verde
y un velillo blanco

La señora Luna
se quiere casar
con un pajecito
de la casa real.

Duérmete, Natacha,
e irás a la boda
peinada de moño
y en traje de cola.


VII

¡Pajarito chino
de color añil!
Canta, que mi niño
se quiere dormir.

¡Pajarito chino
de color punzó!
Calla, que mi niño
ya se me durmió.