Ojo avizor

Flores para Algernon es un libro para leer y releer durante toda la vida. La primera vez serí­a muy bueno que fuera en la adolescencia, como una lectura analizada y discutida en clases. ¡Cuánto aprenderí­a un chico o chica sobre sentimientos, ternura, compasión, respeto, empatí­a al conocer al protagonista de esta historia, Charlie Gordon, y a su primer adversario devenido luego en su gran amigo Algernon! Creo que serí­a maravilloso poder entrar en el mundo de la discapacidad mental y entenderla desde una edad temprana.

Con este libro, el sicólogo y escritor norteamericano Daniel Keyes (Brooklyn, 1927- Boca Ratón, 2014) logra describir en detalles cómo funciona emocionalmente un joven retrasado, cómo siente, su necesidad de amigos y afectos, sus frustraciones, la conciencia que tiene de ser diferente y cuánto sufre al sentirse burlado.

A través de sus Notas de Progreso, durante un experimento al que voluntariamente se une "para volverse más listo", Charlie Gordon va entrando en el alma del lector y hay momentos en que nos deja sin aliento, y nos recuerda a los tantos como él que hemos visto pasar con indiferencia o con lástima, pero sin un poco de afecto. Confieso que me habrí­a gustado mucho leer esta novela durante mi primera juventud. Me hubiera ayudado a comprender el sufrimiento que sentí­a intuitivamente al ver la forma despectiva y la risa que causaban los enfermos mentales o los llamados "bobos" en las afueras de la escuela o en las paradas de ómnibus. Sin embargo, nunca es tarde para leer esta obra maestra del autor estadounidense Daniel Keyes.

La manera magistral en que se va desarrollando la historia: al principio con una forma rudimentaria de escritura que refleja el pensamiento simple de un niño pequeño y que evoluciona a un análisis profundo tanto de sus sentimientos como de su intelecto, para luego regresar al primero, pero ya entonces con la conciencia de lo que tuvo y perdió, es un proceso estremecedor que le ofrece al lector adulto varios planos para un análisis que abarca más que lo emocional y se transforma en un punto de partida para revisar nuestra concepción del mundo. Flores para Algernon es un regalo para el espí­ritu y, si dudas, coloca a Keyes entre los inmortales de la literatura.

Esta obra, publicada por primera vez en 1966, ganó el Premio Nebula 1967, que otorga anualmente la organización de Escritores de Ciencia Ficción y Fantasí­a de Estados Unidos, y fue candidata al Premio Hugo 1967 que se otorga a las mejores narraciones de fantasí­a y ciencia ficción.