La danza de los esclavos. Paula Fox
La bochornosa trata negrera sirve de escenario a la novela La danza de los esclavos (The slave dancer), de la escritora estadounidense Paula Fox, ganadora premio Andersen en 1976. Jessie tiene 13 años y vive en Nueva Orleans junto a su madre y su hermana, quien está muy enferma. Le gusta perderse por las calles de su ciudad, caminar por el muelle y pasear por la plaza donde son vendidos los negros. Le gusta hacerlo tocando su pífano, lo cual le permite, además, ganarse unas monedas. Una tarde, es secuestrado por dos marineros y llevado a un barco, The Moonlight.
Una vez que ha zarpado la embarcación, el muchacho descubre que se dirigen al golfo de Benin, donde la nave del capitán Cawthorne recogerá un cargamento de negros cuyo destino es ser vendidos en Cuba. La tarea que le corresponde a Jessie consiste en tocar su instrumento musical para que los esclavos dancen y se conserven en -buenas condiciones físicas durante la travesía.
A lo largo del viaje, conocerá de cerca las injusticias de la esclavitud y la maldad de los tripulantes del barco, pero también descubrirá la bondad y solidaridad que pueden establecer los seres humanos para enfrentar situaciones difíciles y vencerlas.
Novela con grandes componentes de aventura, escrita a la manera de los clásicos relatos de Stevenson y Salgari, incorpora, con acierto, la crítica social al abordar la problemática del comercio de esclavos en el siglo XIX.
Esta novela de Paula Fox obtuvo la medalla Newbery en 1974. Noguer, que la dio a conocer en español años atrás con el título ¡Qué bailen los esclavos!, la ha reeditado con su título original y con una atractiva nueva cubierta. Una buena recomendación para lectores juveniles, en especial para aquellos que se interesan por la aventura y la historia.