La niña de los pájaros

La niña de los pájaros. Mónica Rodríguez

Algunas experiencias cubiertas por el velo del recuerdo parecen increíbles, aunque en realidad hayan ocurrido. El protagonista de esta historia, ya viejo, rescata memorias de su infancia, habitada por pájaros: los que atrapaba como mascotas y aquellos que volaban libres, dictando los cambios del tiempo.

Un día, junto con los pastores nómadas, llega una niña hosca y enigmática, que tiene un don especial para comunicarse con las aves y, sobre todo, para ayudarlas a recuperar su libertad, una apremiante lección que dejará en el niño de esta historia, cuya inocencia estará por resquebrajarse.

Con un diestro manejo del lenguaje, de oraciones cortas y palabras certeras, esta novela de la aurora Mónica Rodríguez retrata el universo áspero de una infancia rural, equilibrado en su ternura y en su crudeza. Desde la perspectiva de un niño, se recrea la frugalidad de una comunidad campesina, poblada de adultos severos y silenciosos, donde los más pequeños conforman una tribu salvaje de enorme conexión con el mundo natural.

El paso del tiempo se contabiliza por la temporada de lluvias, la aparición de los pastores, las procesiones de Semana Santa… acontecimientos que rompen la monotonía, pero especialmente por la llegada de las cigüeñas, espléndidas y siempre esperadas. De nuevo, anidarán en el campanario de la iglesia, pero esta vez uno de los polluelos quedará en tierra y cambiará la vida del protagonista. Las despedidas son necesarias e inevitables.

Al final, un proceso de transformación cierra el ciclo, en el que lo fantástico irrumpe con la partida de la pequeña pastora, que deja un vacío y una ambigua sensación. Esta novela, nostálgica, sostiene el punto de vista del narrador e involucra al lector en experiencias de una niñez indómita y libre, donde se viven acontecimientos corrientes como experiencias nuevas. El asombro y la fuerte presencia de la naturaleza, en sus eventos más notables o en sus manifestaciones más diminutas, dosifican la tensión y trazan el desenvolvimiento de la cotidianidad de un niño, que aún vive inmerso en el juego y la fantasía, pero que poco a poco comienza a incursionar en otras dimensiones de la existencia.

Las ilustraciones de extienden en imágenes el contexto bucólico y entrañable. Una lectura que conduce al lector a sus propios recuerdos y siembra la duda sobre los eventos sobrenaturales que sacuden la realidad.
Fanuel Hanán Dí­az