La cabeza de Tomás

La cabeza de Tomás. Mireya Tabuas y Yonel Hernández

Cuando la maestra pregunta cada lunes: “A ver, niños, ¿qué hicieron el fin de semana?”, todos levantan para la mano para contar lo que han hecho con sus familias. Todos menos Tomás, quien los observa mientras se interrumpen por hablar al mismo tiempo. Cuando, por fin, la maestra le insiste, Tomás cuenta las aventuras más fantásticas e increíbles. 

Aunque es introvertido, la cabeza soñadora de Tomás contiene universos infinitos, los eventos cotidianos se convierten en escenografías insólitas.  “¿Lo soñaste o realmente sucedió?”, le pregunta la maestra cada vez.

En esta historia de la autora venezolana Mireya Tabuas, la imaginación se instala como una dimensión que coexiste con la realidad, y se defiende el derecho a asumirla como una experiencia necesaria en el contexto escolar, en la medida en que una solución sobrenatural instala un final donde realidad y fantasía se fusionan.

Las ilustraciones Yonel Hernández, también venezolano, tejen dos planos narrativos, el de la cotidianidad y las experiencias reales en un azul oscuro, que contrastan con un rojo, vivo y expansivo que nos muestran la mirada de Tomás y lo que construye a partir de lo que escucha y lo que imagina. Además, una historia paralela ocurre en un árbol que sirve como espacio simbólico para un nido de pájaros que hacen vida y crecen como la imaginación desbordada de Tomás, amenazados por un gato que intenta asaltarlos, del mismo modo que la duda de los adultos mina la natural capacidad de soñar que tienen los más pequeños.

En este libro ilustrado, de estructura sólida se desarrolla una reflexión sobre esa permanente dicotomía entre realidad y fantasía, al mismo tiempo que se planeta una ironía sobre la forma como la escuela debilita otros procesos que son vitales para entender el mundo y expresarse. Una visita a museo puede convertirse en una experiencia rutinaria o también podría estimular la capacidad de fabulación.

El personaje de Tomás, silencioso y retraído, refleja a muchas personas que están a nuestro alrededor que muchas veces prefieren el anonimato o la invisibilidad, pero que contienen un mundo interior divergente y rico. Por eso, el acercamiento interesado y la valoración que todos los adultos debemos hacer de las opiniones de los niños nos confirma que no existe una sola verdad ni una manera única de mirar el mundo.

Una obra reconfortante, publicada en Estados Unidos por el sello Alliterarion Publishing, que integra armoniosamente el lenguaje visual y el literario y nos permite vislumbrar la infinitud de la invención. 

Fanuel Hanán Dí­az