Ojo avizor

¿Cómo hablarle a un niño de una de las enfermedades más devastadoras de la vejez? ¿Cómo explicarle lo que representa y significa que un abuelo, un padre u otro adulto del círculo familiar padezca de ese mal donde todo se olvida, incluso quién es uno mismo? Este hermoso álbum de la argentina María Elina, que recrea la historia de León, un pequeño cuya abuela asegura ser reina, puede ser una buena vía para una aproximación a esa clase de trastorno.

Mediante la construcción de fábulas que surgen a partir de la percepción alterada de su abuela, el protagonista de esta obra consigue incorporarse al mundo fantástico que habita la anciana. El pequeño León acepta como válido y real, sin cuestionamientos inútiles, ese universo alternativo. Si la encuentra sentada en el barro y sin zapatos, el niño la imita. Si ella asegura que tiene un castillo de ciento veinte habitaciones, el nieto lo acepta sin recelos. Y esa aceptación se convierte en un modo de lidiar con lo irreversible e irreparable de esos cambios desde una perspectiva lúdica.

Las delicadas imágenes, de tonos pálidos y silueteado traslúcido, apoyan el ambiente íntimo e impreciso que sugiere un texto marcado por las ambigüedades de la memoria que se desvanece.